Datos biográficos
Vicente-Marino nació en julio de 1917 en el hospital San Rafael de Santander -actual sede de la Asamblea Regional de Cantabria-. Su primera y larga caminata fue justo tras el parto y en brazos de su madre, que caminó 22 km hasta Polanco empujada por la pobreza. Fue criado junto a su hermana por sus abuelos maternos de origen francés —Paul Pecousteau y Marie Martínez— dado que su madre se mudó a Madrid con su padrastro —no tuvo relación con su padre biológico—. Sus abuelos maternos, tras haber criado cuatro hijos en la calle del Sol de Santander, se mudaron en 1905 a Polanco por la apertura de Solvay, dejando atrás la fábrica de betún Éclipse.
Vicente tuvo mala suerte en la educación formal. De la breve estancia en los párvulos de la empresa al colegio de Polanco, en donde estuvo hasta los ocho años, «No aprendí nada». Posteriormente, fue a otra escuela en Barreda, pero, tras un castigo físico que recibió del maestro, su abuela lo sacó de la escuela. Entonces, recuerda los tiempos de juegos y lectura, de pesca con su abuelo, y de trabajos varios (cosiendo sacos y alpargatas o repartiendo leche). Su interés por la política surge en 1930, tras la conversación con un vecino “de ideas avanzadas” que le habló sobre “la grave situación del país”. En octubre de 1935 es el momento de su segunda gran caminata. Tenía 18 años cuando participó en la marcha a pie en siete etapas al mitin de Manuel Azaña en el campo de Comillas (Madrid) junto a otras amistades, como el anarquista José Pernía González. Vicente decidió probar suerte en la capital española, se estableció con sus padres en la calle Hermosilla —cercana al parque de El Retiro, en donde su padrastro trabajaba de fotógrafo— y comenzó a trabajar como repartidor en una empresa de productos lácteos. Al tiempo, animado por nuevas amistades, ingresó en la organización Juventud Comunista —denominada desde marzo de 1936 Juventudes Socialistas Unificadas (JSU)—, y simultáneamente comienza a militar en el Partido Comunista (febrero, 1936) y en junio en las Milicias Antifascistas Obreras y Campesinas (MAOC).
Tras el golpe de Estado contra el gobierno de la República, el 20 de julio de 1936 Vicente participó en la toma del cuartel de la Montaña, hecho clave en la paralización de la sublevación militar en la capital. Tras esto, aprendió las primeras lecciones de manejo de armas en el cuartel Francos Rodríguez y en los primeros días de agosto salió hacia el frente de Guadarrama a combatir en el Alto del León, como parte de la 4ª compañía de “Acero” de milicias del Quinto Regimiento —unidad militar madrileña ligada al Partido Comunista de España—, al mando de Juan Modesto y Enrique Líster, lugar en que coincidió por primera vez con Dolores Ibárruri, la Pasionaria. Las batallas en las que participó con la División Líster fueron numerosas (Jarama, Guadalajara, Ebro, Centro o Aragón). Durante esos años de combates ingresó en dos ocasiones en hospitales: en La Princesa de Madrid y en Cambrils “del Mar”. Finalmente, en noviembre de 1938 cae prisionero en Cataluña tras un encuentro con la división Littorio del Corpo Truppe Volontarie (CTV). Ahí comenzaron siete años de prisiones sin juicios con estancia en la cárcel de Borjas Blancas (Lérida) y tres años en Málaga repartidos entre el campo de concentración de La Aurora y la cárcel provincial, otros centros de reclusión y finalmente la cárcel de Porlier en Madrid. Tras su liberación hizo varios intentos laborales en Cantabria y Barcelona hasta que en 1947 cruzó la frontera y se mudó a París hasta principios de los años 80 en donde, entre otros trabajos en fábricas fue chofer de Hermes Herrera Hernández, el entonces embajador de Cuba ante la UNESCO. Desde su liberación hasta su jubilación con 65 años, Vicente ha trabajado en numerosas empresas como Solvay, Sniace, también en fábricas de tejidos o de ladrillos y tejas.
La historia de Vicente, a sus 104 años (2022), se presenta con los momentos más impactantes para él y se construye en detalle con sus memorias escritas “retazos de familia, por un lado, y de guerra, por otro, escrito… Unas veces apoyando la libreta sobre el volante del automóvil… en los momentos tardíos de la habitación… antaño en la trinchera, en guerra apoyando las cuartillas en el plato de aluminio sobre las rodillas o en la cárcel…”; en los que siempre rememora a “todos los Pecoustán”, su familia querida, “amistades, el puebluco Barreda y su Cantabria querida”.
Equipo de realización
Entrevistadora: Zhenya Popova
Operador de Cámara y montaje: Txatxe Saceda